Soneto a mi pequeña de ojos verdes

Niña bonita por celos te fuiste, 
tus conversaciones aún atizan 
y todavía en mi mente aterrizan. 
Niña bonita mi amor recibiste… 

No viste ni tampoco lo entendiste, 
que tus ojos en mí se inmortalizan 
y los sueños sin ti me aterrorizan. 
Sigo triste porque te me perdiste. 

Al leer este soneto deseo 
que vuelvas a recoger mis pedazos, 
como el perdón recoge al pobre reo. 

Espero con ilusión los abrazos 
y pido a las estrellas, que aún veo, 
que sigas en búsqueda de mis brazos.

-EL POETA INCOMPRENDIDO-

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu tiempo.